Contacto
ATELIER » MANDALAS DEL URUGUAY»
arteconmandalas@gmail.com
+598 94 940294
https://www.facebook.com/ateliermandalasdeluruguay/
Montevideo – Uruguay
ATELIER » MANDALAS DEL URUGUAY»
arteconmandalas@gmail.com
+598 94 940294
https://www.facebook.com/ateliermandalasdeluruguay/
Montevideo – Uruguay
La palabra Mandala es sánscrita (lengua sagrada de la India).
Literalmente significa “círculo”, aunque conceptualmente se refiere a “la forma que contiene la esencia”.
“Manda” = Esencia, “La”= Recipiente
Es una imagen claramente estructurada, compuesta de un centro y una periferia.
El psiquiatra suizo Carl Gustav Jung (1875-1961) utilizó los mandalas como recurso terapéutico y los definió como: “la expresión psicológica de la totalidad del ser”. “Es el camino hacia el centro”.
El origen de todo Mandala es su centro, sitio en el que reside la esencia de uno mismo, y en el que se ordenan los elementos de la psiquis y del espacio que nos rodea.
La forma centrada está presente en todas las culturas.
Está presente en todo nuestro entorno, tanto en la naturaleza como en el arte.
Ya en las antiguas civilizaciones y pueblos primitivos, se encontraban presentes los mandalas en los dibujos que creaban intuitivamente partiendo de la observación de la naturaleza.
Mandala es una flor con sus pétalos abiertos, una galaxia, una célula, el iris de los ojos, la mitad de una naranja.
Numerosas tribus indígenas americanas y aborígenes australianos han utilizado los mandalas como símbolos rituales así como elementos de curación y sanación.
En Oriente (hindúes, tibetanos, budistas) los han empleado para adorar a la divinidad, como instrumento de meditación y para representar el micro y macrocosmos.
También los podemos encontrar en vitrales y rosetones de iglesias y castillos europeos.
Nuestro mundo actual la redescubre por la necesidad de volver a centrarse.
Algunos de los beneficios de la contemplación y del trabajo con mandalas son:
Equilibran y armonizan, generan estados de ánimo positivos, mejoran la concentración, ayudan a superar miedos, nos relajan y tranquilizan, incentivan la autoconciencia, nos conectan con nuestra esencia, incrementan la seguridad en uno mismo y estimulan la creatividad.